Publicado 16-01-2003
Academia de Guerra y Politécnica del Ejército realizarán investigaciones para el Fondef y el Fondecyt, respectivamente.
Por primera vez desde que el Gobierno implementara el sistema de proyectos y fondos concursables para investigación científica y tecnológica, dos programas surgidos desde academias militares fueron seleccionados como ganadores por el Fondef y el Fondecyt.
Ambos sistemas fueron creados para fomentar el desarrollo científico y técnico del país, y entregan anualmente recursos para financiar proyectos de claro beneficio para la sociedad.
Este año la Academia de Guerra del Ejército y la Politécnica Militar postularon a estos fondos con un software computacional para el manejo de catástrofes naturales y otro de percepción remota, los que fueron bien evaluados y aceptados por dichas entidades dependientes de la Comisión Nacional Científica y Tecnológica (Conicyt).
La Academia de Guerra realizó el proyecto en conjunto con la Universidad Católica del Norte.
El principal objetivo es establecer un programa computacional denominado “Simulación para la Gestión y Entrenamiento de Situaciones de Emergencia” que busca crear una herramienta computacional de fácil descarga desde internet que ayude a tomar decisiones a las autoridades y a los distintos estamentos del Estado en caso de catástrofes de distinta naturaleza.
Este software se construirá sobre la base de una plataforma multimedial y su uso permitirá la fácil instrucción, capacitación y entrenamiento de todas las personas involucradas en la solución de los problemas, a nivel comunal, provincial y regional.
Este trabajo de investigación que tendrá una duración de dos años y en el que trabajarán 20 profesionales, se probará primero en Antofagasta, Segunda Región.
En el caso de la Academia Politécnica, el proyecto tendrá una duración de cuatro años y estará orientado al desarrollo de inéditas tecnologías de percepción remota, de última generación y complejidad.
Se realizará en alianza con la empresa Linktronoc Ltda. y la Pontificia Universidad Católica de Chile.
El Mercurio
16 de febrero de 2003
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