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El colihue y la quila salen al mercado

Publicado 21-04-2008

Santiago, 21 de abril. Desde muebles hasta brotes comestibles son los nuevos productos que empresarios sureños han incorporado al mercado local. Fuente: Revista del Campo, El Mercurio

 

 

PATRICIO GÓMEZ PASTENE

 

Giovanni Blanco es un ingeniero civil en industrias forestales que se dedica al desarrollo de proyectos relacionados con el colihue nacional, una variedad local del bambú. No le va mal. Exporta las cañas a Estados Unidos, Alemania, México, sur de Europa, Medio Oriente y norte de África.

 

“Me gustaría demostrar que plantar y cosechar colihues puede ser un gran negocio en el mediano plazo. No sólo desde el punto de vista económico, sino también en el ámbito medioambiental, social y energético. La idea es trabajar con volúmenes manejados. Hay enormes requerimientos del mercado mundial”, explica Blanco.

 

Aunque el bambú ha sido utilizado históricamente en las culturas milenarias orientales, recién en los últimos 30 años se ha desarrollado una industria alrededor de este vegetal, y su relevancia social pasó rápidamente al ámbito económico. Hoy se mueven 7 mil millones de dólares en el mercado mundial.

 

La industria es liderada por China, India y Japón. A nivel latinoamericano, Brasil destaca por tener unas 200 mil hectáreas plantadas para la producción de papel.

 

Y Chile comienza a sumarse a esta corriente con sus bambús autóctonos, la quila y el colihue, considerados durante mucho tiempo como una plaga.

 

Cluster Productivo

 

A fines de los ’90, la Fundación Chile y la U. Austral comenzaron un proyecto de desarrollo integral del bambú con el que se logró establecer que al año 2000 existían alrededor de 900 mil hectáreas de esta especie que pueden tener algún uso productivo, entre la Región de los Lagos y Aisén. Los estudios de mercado determinaron, además, la existencia de un comercio marginal que alcanzaba a 5 millones de cañas, por un valor equivalente a un millón de dólares en el año 2000.

 

En la segunda etapa, con apoyo de Fondef, se buscó desarrollar productos derivados de quila y colihues. Se invirtió entonces en el desarrollo de tableros listonados para revestimientos laterales, cielos y decorativos.

 

“Hicimos estudios de mercado en Chile, Brasil y México. Los tableros tuvieron muy buenos resultados, pues se vio que, por ejemplo, en Brasil existe público dispuesto a pagar más por ellos que por los de madera”, destaca Carlos Kahler, director de la Red Chilena de Bambú.

 

Además, aunque el colihue y la quila no poseen las dimensiones de un bambú tropical, sí tienen la ventaja de contar con un centro sólido, diferencia que puede potenciar usos sobre los que se investiga.

 

“Hasta hace algún tiempo era impensable estudiarlo en las universidades. Pero en los últimos tres años se han desarrollado una veintena de tesis referidas a diferentes ámbitos del tema”, explica Kahler

 

Además, la ley del bosque nativo le reportará grandes beneficios. “Esta ley incorpora los productos forestales no madereros al manejo forestal y va a promover el aprovechamiento sustentable de estos productos. Además, existen beneficios económicos por lo que, gracias a la ley de bosque nativo, los productores podrían recibir algún tipo de subsidio”, sostiene Carlos Kahler.

 

Brotes comestibles

 

Es un producto muy similar en forma al palmito y se comercializa hace años en China y Taiwán. Los brotes se extraen antes de que la planta comience a crecer. Se le considera un producto orgánico y saludable, bajo en calorías y rico en fibra. La empresa de Jacqueline Linzmayer produce bamas de bambú en Puerto Varas, para el mercado nacional.

 

Un vegetal amigable

 

El bambú es uno de los vegetales que tienen el mayor ritmo de crecimiento. A diferencia de los árboles, nacen con un diámetro definitivo y su altura la adquieren durante la primera fase de su desarrollo, que oscila –dependiendo de la especie– entre 2 y 3 meses.

 

“Es un vegetal muy amigable desde el punto de vista ecológico, pues tiene una alta tasa de reposición, y cumple una función ambiental que es muy importante, al desarrollar una estructura de tallos subterráneos que es fundamental en la retención de procesos erosivos”, expresa Carlos Kahler, director de la Red Chilena de Bambú.

 

Pisos y muebles de colihue

 

José bustos está ad portas de comenzar la producción de pisos densificados en las cercanías de Pucón. Además, diseña innovadores muebles y lámparas a partir de este vegetal, aptos para decorar todo tipo de espacios.www.ambientezen.cl

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