PIA Programa de Investigación Asociativa

La Institución agrupa a los más destacados científicos del país elegidos por sus pares. La doctora Dora Altbir se convierte en la primera académica mujer de la Universidad de Santiago de Chile en recibir tan alto reconocimiento.

Doctor Miguel Kiwi, la doctora Dora Altbir Drullinsky; y el doctor Juan Asenjo, presidente de la Academia Chilena de Ciencias.

En una Sesión Pública dirigida por el presidente de la Academia Chilena de Ciencias, profesor Juan Asenjo, fue recibida como nuevo Miembro Correspondiente la académica del Departamento de Física de la Universidad de Santiago de Chile, doctora Dora Altbir Drullinsky.

En la ceremonia estuvieron presentes el decano de la Facultad de Ciencia de la Universidad de Santiago de Chile, doctor Rafael Labarca, la presidenta (s) de CONICYT, María Elena Boisier, y destacados científicos como el doctor Rafael Benguria, Premio Nacional de Ciencias Exactas 2005 y la doctora María Cecilia Hidalgo, Premio Nacional de Ciencias Naturales 2006, entre otros.

La bienvenida a la Academia estuvo a cargo del físico y Premio Nacional de Ciencias Exactas 2007, doctor Miguel Kiwi, quien destacó que “para un educador no hay nada más gratificante que el orgullo por una alumna que, con el correr de los años, lo supera ampliamente”. El doctor Kiwi fue supervisor de la profesora Altbir en sus trabajos de Licenciatura y Doctorado en la Pontificia Universidad Católica de Chile y desde entonces, enfatizó “se ha destacado como investigadora en el área de la física teórica de la materia condensada”.

De acuerdo al reglamento, para ser elegido integrante de la Academia –ya sea como miembro de número, correspondiente en el país o el extranjero- se requiere “ser un científico activo, de reconocido prestigio, confiable y mayor de 35 años”.

Doctor Miguel Kiwi, la doctora Dora Altbir Drullinsky; y el doctor Juan Asenjo, presidente de la Academia Chilena de Ciencias.

El reglamento también explicita que la calidad de activo se juzgará por la calidad de la investigación de los candidatos –que son postulados por integrantes de la Academia- medida por sus publicaciones en revistas científicas de alto nivel, así como en libros y monografías, y por su contribución a la formación de discípulos que cultiven activamente alguna rama de las ciencias.

La productividad científica de la doctora Altbir es destacable tanto en cantidad como impacto de sus publicaciones. La base de datos Web of Science registra 83 publicaciones entre 1988 y 2014, las cuales han recibido 1063 citas y un índice h de 21.

Durante su discurso Miguel Kiwi enfatizó que paralela a su exitosa carrera científica Dora Altbir ha desarrollado “una impresionante labor directiva, administrativa y de política científica en la ciencia nacional, lo cual es una afortunada conjunción que se da muy raras veces”. Actualmente es directora del Centro para el Desarrollo de la Nanociencia y la Nanotecnología (Cedenna), dirige el Núcleo Milenio de Magnetismo Básico y Aplicado de la Universidad de Santiago de Chile y es Miembro de la Comisión Nacional de Acreditación, representante del Consejo de Rectores de Universidades Chilenas.

La ceremonia incluyó un discurso de incorporación a cargo del nuevo miembro de la Academia titulado “Del mundo nanoscópico al mundo visible: Una travesía por el magnetismo”, en la cual la física recorrió su trayectoria profesional desde sus inicios hasta ahora, enfocada principalmente en el estudio de la interacción dipolar magnética que se da entre espines electrónicos y que ha permitido en la práctica entender el comportamiento magnético de una gran variedad de sistemas que se utilizan en aplicaciones médicas, discos duros, y medios de grabación, entre otros.

Dora Altbir agradeció a sus profesores y colegas que han influido en su pasión por la física así como a los estudiantes de pre o postgrado que ha formado en el trascurso de estos años y, muy especialmente a su familia por su “apoyo incondicional”. La científica concluyó diciendo que “la ciencia tiene importancia en si misma, pues las aplicaciones más interesantes son con frecuencia aquellas que nunca imaginamos al iniciar una investigación”.

La Academia
La Academia Chilena de Ciencias agrupa a los más destacados científicos del país elegidos por sus pares y su quehacer está ligado a la actividad científica y los investigadores y especialistas inmersos en ella. La elección de sus Miembros en cualquiera de sus calidades (número, correspondientes nacionales, correspondientes extranjeros y honorarios), depende de la calidad de sus trabajos de investigación, los cuales deben ser publicados en revistas científicas de alto nivel, así como en libros y monografías, además de haber formado discípulos que cultiven activamente alguna rama de las ciencias.

Esta institución es una entidad reconocida en el medio internacional, y posee acuerdos de colaboración con la Academia de Ciencias de Francia, la Real Academia de Ciencias de Bélgica, la Royal Society, la Nacional Academy of Sciences de Estados Unidos.
Con esta designación, son dos académicos de la Universidad de Santiago de Chile que integran la Academia Chilena de Ciencias: Dora Altbir y el doctor Eduardo Lissi,  profesor Titular en la Facultad de Química y Biología de dicha Casa de Estudios, ambos como miembros correspondientes de esta prestigiosa institución.