Publicado 17-05-2010
[17/05/2010] El Centro, que depende de la Universidad Católica y es financiado por CONICYT, se encuentra preparando en conjunto con el CIAE, de la Universidad de Chile, el Primer Congreso Interdisciplinario de Investigación en Educación.
César Muñoz, Director del Programa de Investigación Asociativa (PIA) de la Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (CONICYT), realizó una visita al Centro de Estudios de Políticas y Prácticas en Educación (CEPPE), en el Edificio Desarrollo Docente del Campus San Joaquín de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Allí se reunió con Cristián Cox, Director del CEPPE, y con los directivos de este centro de estudios.
Se trató de una actividad de seguimiento del primer año de operación del Centro y de análisis de cómo se proyecta su crecimiento.
Aspecto de la reunión entre César Muñoz, Director del Programa de Investigación Asociativa (PIA) de CONICYT, y los directivos del CEPPE.
El CEPPE y el Centro de Investigación Avanzada en Educación (CIAE), de la Universidad de Chile, están organizando el Primer Congreso Interdisciplinario de Investigación en Educación, que se realizará el 30 de septiembre y 1 de octubre en el Hotel Crowne Plaza. Ambos Centros fueron establecidos en 2008 con financiamiento de CONICYT.
Participarán también sus instituciones asociadas: la Universidad de Concepción, la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, la Universidad de La Frontera, la Universidad Alberto Hurtado y la Fundación Chile. Al mismo tiempo se realizará el II Congreso de Investigación en Educación Superior coorganizado con el Centro de Políticas Comparadas de Educación (CPCE), de la Universidad Diego Portales.
El objetivo del Congreso es convocar al conjunto de disciplinas que hoy tienen investigación relevante para la educación del país: educación, sicología, sociología, economía, ciencias políticas, historia, ciencias básicas, ingeniería, medicina, etc.
-¿Qué hace especial a este congreso?
“Tiene varias dimensiones de innovación, que no tienen precedentes en eventos de este tipo en el país”, responde Cristián Cox. “La principal de todas es su carácter interdisciplinario. Reunimos en un solo espacio a todos los que están preocupados de la educación en diversas disciplinas: economistas, sicólogos, educadores, cientistas políticos… Y así podemos conocer lo que producen estas ‘tribus disciplinarias’. Estamos apostando al valor de crear condiciones para hacer converger la investigación para producir algo útil para lo que necesita el país en educación. Algo que sea verdaderamente relevante tanto para los políticos como para los educadores. Y estamos apostando a que este evento se realice cada dos años, se convierta en un referente, sea el inicio de una tradición”.
-No es un solo evento, entonces…
“Queremos ofrecer cada dos años esta instancia en que nos juntemos todos los que trabajamos en investigación en educación. Los dos Centros, sus universidades (la Universidad Católica y la Universidad de Chile) e instituciones asociadas (Universidad de Concepción, Universidad Católica de Valparaíso, Universidad Alberto Hurtado, Universidad de La Frontera, Fundación Chile), además de los invitados internacionales… Ayuda mucho que haya esta ‘fertilización cruzada’; que los economistas y sociólogos aprendan y escuchen criterios ‘cruzados’ de definición de problemas; que los sicólogos escuchen a los educadores; que la reflexión y el análisis de las políticas educativas se beneficie de la mirada disciplinaria de las ciencias políticas. Estamos apostando a que va a haber una sinergia nueva e interesante”.
-Llama la atención que use la palabra “útil”; no es muy frecuente ese término entre algunos investigadores.
“La distinción entre investigación básica y aplicada se usa menos en los temas referidos a educación que en otras áreas. Los dos centros tienen una vocación de producir una investigación que sea relevante para los problemas del país y, en este sentido, es investigación aplicada. La vocación de estos centros es producir algo que sea relevante para el sistema escolar del país. De hecho, el lema del Congreso es ‘Investigación para una Mejor Educación en el Bicentenario de Chile’. Esto no es un obstáculo para que haya papers teóricos o algo puramente conceptual, pero la dirección fundamental está para nosotros plasmada en el nombre del CEPPE, Centro de Estudios de Políticas y Prácticas en Educación: los dos términos (‘políticas’ y ‘prácticas’) apuntan a algo que es relevante para problemas decisivos en la educación del país. El CIAE tiene la misma orientación fundamental de aportar conocimiento sobre problemas centrales de la educación nacional”.
-Ambos Centros (el CEPPE y el CIAE), ¿son complementarios o competitivos?
“Estamos buscando ser complementarios. Estamos buscando que no seamos redundantes en nuestro quehacer. Son dos grupos que tienen una composición disciplinaria diferente. El de la Universidad de Chile tiene un grupo importante de neurobiólogos, y una investigación básica sobre biología del conocimiento, algo que nosotros no tenemos. Al mismo tiempo, como nos comunicamos con frecuencia y estamos organizando juntos estos eventos para el Bicentenario, conocemos las respectivas agendas y tratamos de cooperar y de no repetirnos”.
-Es notoria en el CEPPE una fuerte mezcla de investigación social e investigación tecnológica.
“En el ámbito de las tecnologías de la información y comunicaciones (TIC), los equipos del profesor Miguel Nussbaum están en cuestiones que pueden rotularse como ‘tecnología’; son equipos que diseñan software que está en la punta mundial de desarrollos tecnológicos de esa área, y que los prueban experimentalmente en escuelas chilenas. Acabamos de tener una investigación doctoral en la que se indaga qué impacto cognitivo tiene el uso de equipos desarrollados en este marco. Se trataba del uso de una pantalla con tres mouses, con cada alumno controlando una fracción de la pantalla del computador en escuelas de pobreza. Es un tipo de investigación que tiene que tener la ingeniería de computación y de comunicaciones como para instalar en una sala de clases pobre estos dispositivos. Es ingeniería computacional al servicio de un uso ‘blando’. Luego, ponemos bajo el microscopio qué pasa con la colaboración, qué pasa con el desarrollo de lenguaje, qué pasa con la competencia lectora de los niños de cuarto básico. Es una conjunción fecunda de ingeniería y ciencias sociales. El CEPPE tiene un rango amplio, que va desde disciplinas como la ingeniería y la economía a la educación, pasando por la sociología, la sicología y las ciencias políticas”.
Más información del Congreso Interdisciplinario:
http://www.ciie2010.cl/
El llamado a presentar trabajos para el Primer Congreso Interdisciplinario de Investigación en Educación:
https://www.conicyt.cl/573/article-35862.html