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CONICYT se reúne con investigadores y académicos para abordar formación de capital humano avanzado

Publicado 27-08-2018

  • Desde la asignación de beneficios complementarios hasta inserción de nuevos investigadores con grado doctor, la institución ha estado trabajando con representantes de universidades y asociaciones de investigadores para buscar soluciones y mecanismos de trabajo en conjunto.

Las autoridades de CONICYT junto a Vicerrectores de Investigación y directores de Postgrado de las universidades CRUCH, a quienes se sumaron representantes de asociaciones de investigadores, ANIP y ReCh.

Una serie de reuniones de trabajo se han llevado a cabo durante las últimas semanas en CONICYT, como parte de la política de puertas abiertas de la institución, para dar solución a las inquietudes generadas en el sistema nacional de investigación científica y formación de capital humano avanzado, ante los cambios derivados por la mayor demanda por beneficios complementarios y las limitaciones del presupuesto asignado por Ley.

Fruto de estos encuentros, se ha logrado consensuar una serie de medidas para minimizar el eventual impacto de estos cambios, como, por ejemplo, extender los plazos del proceso de solicitud de beneficios complementarios en diez días, y establecer dos períodos durante el año para llevar a cabo este proceso. De esta forma, se acordó que además del período de solicitud establecido entre agosto y octubre, existirá otra posibilidad de hacerlo entre marzo y mayo de 2019.

“Sabemos que son temas sensibles y empatizamos con sus demandas. Nuestro espíritu es que los estudiantes de doctorado puedan tener la mayor cantidad de apoyo de parte de CONICYT para desarrollar mejor sus investigaciones”, manifestó el Presidente del Consejo de CONICYT, Dr. Mario Hamuy, ante los representantes de la Red de Afectados por Beneficios Complementarios que fueron recibidos en el edificio institucional de CONICYT durante la segunda semana de agosto.

Constanza Richards, estudiante de doctorado en derecho de la Pontificia Universidad Católica y uno de los miembros de la Red de Afectados por Beneficios Complementarios, que participó de la primera reunión, señaló que se valoraba positivamente la medida de reasignar $2.111 millones de pesos para solucionar el problema de los beneficios complementarios pendientes, así como también la posibilidad de reunirse con las autoridades institucionales para resolver las dudas pendientes.

Días más tarde las autoridades de CONICYT volvieron a reunirse en una mesa de trabajo, esta vez con representantes de la mencionada Red, junto a Vicerrectores de Investigación y directores de Postgrado de las universidades CRUCH, a quienes se sumaron también representantes de asociaciones de investigadores, ANIP y ReCh. En tanto responsables de la formación de nuevos investigadores -los representantes del mundo académico-, valoraron la comunicación con CONICYT y, especialmente, la disposición de la institución a trabajar en conjunto.

En aras de definir una política nacional de formación de capital humano avanzado, las reuniones de trabajo han continuado desde entonces, tanto en CONICYT como en universidades, donde se ha debatido entorno a la situación. Durante la última reunión de trabajo, realizada el viernes 24 de agosto con representantes de la Comisión de Postgrado del CRUCH, se acordó continuar con una agenda de trabajo compartida. “Estamos muy contentos de que CONICYT propicie estas instancias de trabajo. La idea es que nosotros podamos integrarnos como parte de un sistema de formación de capital humano avanzado en que no solo participe CONICYT y los becarios, sino que también involucre a las universidades y sus direcciones de postgrado”, dijo tras la reunión Jani Brower, Directora de Doctorado de la Pontificia Universidad Católica de Chile.

Representantes de la Red de Afectados por Beneficios Complementarios valoraron positivamente la oportunidad de plantear sus dudas ante las autoridades de CONICYT.

Cabe destacar que el fondo del problema que se trabaja en solucionar, es que actualmente los montos para beneficios complementarios son equivalentes a todo el presupuesto disponible para nuevas Becas de Doctorado Nacional, de manera que, si se pensara en cubrir las legítimas demandas de los becarios, en orden de satisfacer el 100% de sus solicitudes para estos beneficios, podría afectarse el otorgamiento de nuevas becas. “Es por ello que se requiere una discusión profunda como la que estamos llevando a cabo en estas mesas de trabajo, que involucre a todos los actores que participan en el sistema, incluyendo becarios, académicos, investigadores y autoridades del gobierno y el Parlamento”, afirma el director ejecutivo de CONICYT, Christian Nicolai.

Por su parte Federico Winkler, director general de postgrado de la Universidad Católica del Norte, señaló que se buscan soluciones en conjunto para optimizar el uso de los recursos disponibles. “Un ejemplo es implementar mecanismos de incentivo para la graduación oportuna, de manera tal que se disminuya la demanda por extensión de las becas”, señaló.

Inserción de investigadores jóvenes

Además de estas reuniones, CONICYT también recibió a representantes de las asociaciones de investigadores, para abordar el tema de la inserción de jóvenes doctores y la discusión generada a propósito de las cifras de una encuesta sobre el tema, dada a conocer en abril por ANIP.

Ambas partes estuvieron de acurdo en señalar que el problema de la inserción requiere ser abordado como un desafío país y que se requiere una mirada más amplia, que incluya definiciones clave, como, por ejemplo, para qué se están formando investigadores. CONICYT llamó a considerar que nuestro país ha instaurado una ambiciosa política pública de formación de postgrados a nivel de doctorado y magíster, mediante Becas Chile al extranjero y Becas Nacionales, la que ha sido exitosa, aunque no exenta de desafíos, como lo es la temática de la inserción.

Para ello se han creado nuevos instrumentos, como el concurso “Subvención a la Instalación en la Academia”, ejecutado por el Programa de Atracción e Inserción de Capital Humano, PAI, de CONICYT. Este instrumento, junto con reconocer el papel crítico que juegan las universidades en el desarrollo científico y tecnológico del país, apunta a contribuir al fortalecimiento institucional mediante la promoción de la instalación en la academia de investigadores que inician su carrera independiente.